diciembre 09, 2011

Coca Cola, IBM e Intel entran en el negocio del agua

Imagen tomada de Internet
Tomado de Yahoo Finanzas.
Por Roberto Arnaz

Mirándolo fríamente, el negocio de Coca Cola no es muy diferente que el de cualquier empresa de procesado de aguas. Toman la materia prima de los acuíferos, la tratan y la ponen al alcance de los consumidores. Sin embargo, hay un pequeño matiz que lo hace sensiblemente más caro: la compañía de refrescos necesita 2,4 litros de agua para fabricar un litro de sus bebidas o, lo que es lo mismo, para ganar un dólar.

Esta dependencia ha hecho que la multinacional estadounidense, junto a otras como IBM, Intel o General Electric, hayan diseñado un programa para buscar una mayor eficiencia en el uso del agua, según afirma un artículo de la revista económica Fast Money. La publicación asegura que no se trata de una repentina preocupación por el medio ambiente, sino de cómo la futura escasez de acuíferos podría acabar con su negocio.

Desde 2004, Coca Cola ha conseguido reducir su uso en más de 30.000 millones de litros, lo que supone un ahorro de casi el 9% del gasto. Las empresas se están dando cuenta de que su consumo de agua es determinante también en los importes de sus facturas de electricidad, carburantes y gestión de desechos químicos.

diciembre 08, 2011

Los CAPS están a punto de explotar su potencial‏

Tomado de La Prensa. Wilder Pérez R.

Foto La Prensa
Los Comités de Agua Potable y Saneamiento (CAPS) viven un proceso de evolución que podría catapultarlos como organizaciones claves en el proceso de desarrollo local, cuando se legalicen.

Así lo creen los miembros de 5,200 CAPS en todo el país. “Somos la máxima expresión organizada de nuestras comunidades... antes no teníamos derecho a elevar nuestra voz, pero ahora tenemos voz y voto, nos sentamos con las instituciones del Gobierno para tomar decisiones”, dijo Juan Benavides Paz, presidente de la Red CAPS.

A pesar de las ventajas legales que ahora tienen, solamente el 15 por ciento de los CAPS se han legalizado desde el año pasado, cuando entró en vigencia su ley creadora, según Santos Rivera, técnico de la Unidad Ambiental de Agua y Saneamiento de Muelle de los Bueyes, Región Autónoma Atlántico Sur (RAAS).

Sin una personería jurídica que los avale, los CAPS no tienen acceso a préstamos, financiamiento, recepción de donaciones, beneficios fiscales, entre otros. “Llevamos diez años y hasta ahora lo único que hemos logrado es comprar un ojo de agua, con nuestro propio dinero, dijo al respecto Albina García, líder del CAPS de San Agustín, El Rama.

Aún así, para este año se propusieron legalizarse, pero también reforestar todas las cuencas de donde sacan agua.

“Imagínese, va a ser bastante”, puntualizó Rivera, a sabiendas de que podrían lograr un impacto mayor que el que logró hasta ahora el Gobierno, con 800 mil estudiantes, pues hay 1.2 millones de personas afiliadas a los CAPS.